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Editorial del Programa ECOS del día 13 de Agosto de 2016

 

La FAO, los bosques, nuestra APN y un ministro incomprensible

 

 

Y la FAO (Fondo de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) se animó! Dijo – al fin, que el agronegocio es responsable del 70% de la deforestación en América Latina.
Uno de sus estudios demuestra que el cultivo extensivo con agrotóxicos fue el origen del 70% de la deforestación en nuestro continente, y, agrega, poniendo en riesgo la biodiversidad y potenciando las inundaciones.
El informe se llama “El estado de los bosques del mundo 2016” y señala que siete millones de hectáreas de bosques tropicales se perdieron por año entre el año 2000 y 2010 debido principalmente al crecimiento de la producción de agronegocios que convirtieron tierras forestales en terrenos agrícolas.
Jorge Meza, Oficial Forestal Principal de la FAO advirtió que “la agricultura comercial de la región no puede continuar creciendo a expensas de los bosques y recursos naturales”. El avance de los transgénicos fue muy abrupto sobre todo a partir de los años 90 y fue avanzando sobre tierras que eran utilizadas para otra cosa.
A ver, por casa, ¿Cómo andamos?
Parques Nacionales, su nuevo staff: salvo Emiliano Ezcurra, que viene del tema, tenemos como Presidente a un ex gerente de Philip Morris. Vocal por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable a un publicista. Vocal por el Ministerio de Turismo de la Nación, a un desarrollador inmobiliario. Al Vocal por el Ministerio de Interior, Obras Públicas y Vivienda, un abogado ex Banco Central de la República Argentina. Si, así como lo escucha. Vaya y mire en la web de Parques.
Y nuestro benemérito Ministro de ambiente, que dijo que el glifosato es un fertilizante y cuando le preguntó INFOBAE sobre los 430 estudios científicos que prueban que el glifosato es cancerígeno.
“Este tipo de situaciones no tiene doble estándares: estudios sólidos que demuestren el efecto que tiene sobre la salud de la población hacen irreversible cualquier discusión, empezando también por la falta de control y la ley, porque si el insecticida que necesitamos por el dengue es imprescindible para protegernos, a nadie se le va a ocurrir estar tomando repelente de insectos”.
Si alguien entiende qué quiso decir, avíseme.