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Editorial del Programa ECOS del día 10 de Noviembre de 2018

 

¿Minería o agua?

 

 

Muchas veces hablamos en todos estos años acerca del uso del agua que la megaminería hidrotóxica hace. Y que el fracking, la fractura hidráulica hace.
Millones y millones de litros de agua al día, para extraer oro, plata o uranio, en zonas donde lo que precisamente no abunda, es el agua.
Y muchas veces nos sentimos tentados a pensar que las comunidades siguen de todos modos viviendo, y que al fin y al cabo, tan grave no será.
¿Cómo construimos ese pensamiento? A partir de noticias que llegan celebrando la instalación de las mineras, la apertura de nuevos pozos de fracking que salvarán la energía del país. Pero a la vez ocultando las noticias de las poblaciones afectadas que no tienen voz en el concierto multimedia nacional.
Usted puede pensar: bueno, pero si fuese tan así, ya estarían muchos pueblos despoblados. Y bien, por un lado, cierto es que se redujo la población en las regiones cercanas a las megamineras. Pero, el factor que no tomamos en cuenta es que el cambio climático se nos vino encima, y que ya los escépticos no tienen argumentos para mantenerse en su escepticismo. No sólo por los fenómenos extremos, que nos hacen diseñar paraguas antigranizo poco menos, sino por otros impactos que, metidos en ciudades, no percibimos.
Hace un par de semanas leía una noticia larga y completa que venía en el diario El Sol, de Mendoza.
Allí, el titular señalaba: “Por la sequía, en 2019 se restringirá el uso del agua para todas las actividades”. “Se trata del primer plan ante la escasez en la historia de la provincia promovido por Irrigación. Se presentará un proyecto de ley a la Legislatura para limitar el uso del agua en todas las actividades productivas y para el consumo humano en el marco del primer plan de Sequía, que obliga un escenario de crisis hídrica agravada por los últimos ocho años de los efectos del calentamiento global”.
Actualmente, la Ley 7.722/07 prohíbe la minería metalífera en Mendoza. Merodean proyectos de voltear la ley para destapar los tres proyectos que duermen: Sierra Pintada de uranio, Potasio Río Colorado y San Jorge de cobre.
Chubut está en la calle peticionando que no les volteen la Ley 5001 también restrictiva por su condición hidrotóxica. Marchas, petitorios, asambleas.
Mendoza tiene una ley que establece los mecanismos de protección ambiental que la minería debe tener en esa provincia, además del Código de Minería de la Nación. Cada proyecto debe tener una Declaración de Impacto Ambiental, cuya aprobación depende del Poder Ejecutivo. Pero la ley 7722 obliga a que la esa Declaración tenga además aprobación legislativa. Es una cláusula de “control político”, extra a la del control técnico. Trataron de voltearla por inconstitucional, pero La Suprema Corte de Mendoza ratificó su legitimidad en un fallo unánime.
Usted me dirá: bueno, todo resuelto. Hecha la ley, listo el pollo. Pero Mendoza no es una isla en medio del océano. Mendoza es una división de punto y raya, cuando se definieron las provincias argentinas, que poco tiene de diferente en su hidrología y su climatología con el resto de la región de Cuyo. Con esto quiero decir que esa crisis hídrica no es made in Mendoza. Es y será para San Juan, San Luis, pero también La Rioja, Catamarca y hasta La Pampa. La escasez de aguas será democrática para todos.
Si reviven los amigos de la hidrotoxicidad, y las mineras campan, usted sabe… una minera promedio está en el orden de los 100 litros de agua por segundo… calcule, son unos 9 millones de litros al día.
No sabemos en qué va a terminar la disputa minería Vs gente en esa región. Lo que sí sabemos es que el cambio climático va a seguir secando la comarca. Que la gente va a seguir en la calle reclamando por su derecho a estar primeros en la lista para recibir el agua. Y, que dijeron los funcionarios sobre la crisis, que "Le vamos a pedir a la gente que nos envíe una foto de manera anónima de dónde se derrocha el agua, lo que será suficiente para intimar al infractor". O sea, como hacían los venecianos en el medioevo, buzones anónimos para que usted denuncie al vecino al que vio regando su geranio… eso sí, de los 9 millones de litros al día que una sola minera usa, ni hablar!