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Editorial del Programa ECOS del día 27 de Julio de 2019

 

Extrañas declaraciones de las autoridades nucleares argentinas

 

 

Quería compartir con ustedes algo bastante extraño que salió en Página 12 el 8 de julio, en donde el diario cuenta que en una carta enviada en junio a los trabajadores de la empresa del estado Nucleoeléctrica Argentina NA-SA, el subsecretario de Energía Nuclear, Julián Gadano, dijo cosas muy preocupantes, y muy contradictorias con su discurso celebratorio de que todo está en orden y la Comisión nacional de Energía Atómica funciona que ni en Suiza.
Dijo (citado por el diario) que “la empresa está atravesando una situación muy delicada”. La compañía acumuló una deuda por más de 4000 millones de pesos con sus proveedores y viene incumpliendo el Convenio Colectivo de Trabajo. “Si todos quisieran cobrar todo al mismo tiempo y rápido, (cito a Gadano) el resultado sería simple y dramático: nadie cobraría, porque la empresa no podría afrontar sus compromisos. Esta es una empresa pública. No tiene arriba un señor ´Burns´ que gana mucho dinero”, dice. Y agrega hablando del desastre financiero “como ustedes saben, la empresa está atravesando una situación muy delicada. (…) Eso es así porque nos hicimos cargo con fondos propios de parte de la última etapa del PEV (Proyecto de Extensión de Vida) de Embalse, y también porque Atucha II generó en los últimos meses muchísimo menos de lo que esperábamos”, dice.
“Estamos en deuda con proveedores que corren serios riesgos económicos, lo que puede implicar situaciones muy complicadas incluso para los trabajadores de esas empresas.”
Hasta ahí lo que tiene que ver con el dinero, pero agrega cosas que nos ponen a temblar si pensamos en la seguridad de nuestras centrales nucleares:
Llama a “desterrar” una serie de prácticas como “el uso de los recursos para fines personales, el ocultamiento de información a otras áreas con fines de beneficio personal, el trabajar en compartimientos estancos para no beneficiar a otros sectores, el fraude laboral, el despilfarro de recursos”.
La Asociación de Profesionales Universitarios del Agua y la Energía Eléctrica envió al subsecretario una respuesta donde cuestiona en duros términos la decisión de haber puesto fondos propios para terminar la extensión de vida de la Central. Y consideran “equivocado participar con fondos propios en esa extensión de vida. Y que eso sumergió a la empresa en una situación financiera difícil.
Porque, afirman y cito: “Fueron derivados a otros fines fondos que deben estar asignados con carácter prioritario a cubrir en forma adecuada todos los gastos inherentes a la generación nucleoeléctrica y a cumplir en tiempo y forma con las obligaciones vigentes con el personal que representamos”.
“Todos los gastos inherentes a la generación nucleoeléctrica”. ¿No alcanzó para la seguridad? Si acusan de ocultamiento y todo lo que leímos, y que la plata no alcanza y en fin, que la comparsa sigue andando, ¿la comparsa en estos términos, podrá tener un accidente?