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Editorial del Programa ECOS del día 25 de Marzo de 2010
Fumigaciones: ¿realmente no se pueden detener?
Quería empezar con una reflexión que viene a cuento del operativo que estamos realizando con BIOS sobre los residuos de plaguicidas en las verduras de consumo, en Mar del Plata y sobre la franja de fumigaciones, cuya ordenanza se halla aprobada pero sin reglamentar.
El Ejecutivo local dice una y otra vez a quien quiera oírlo que es imposible de reglamentar porque implicaría confrontarse con los productores para prohibirles algo.
Pero… no ven que hay otro modo de resolver las cosas, y es en vez de prohibir (para lo cual debieran tener personal – que no tienen – y controles diarios – que no pueden hacer) que es contraproponerles algo a cambio: que produzcan de manera orgánica.
Ustedes no se dan una idea de cómo se dispararon las ventas en la feria agroecológica local a partir de nuestra denuncia. Los muchachos no dan abasto. Las verduras se acaban en la primera media hora.
Si el ejecutivo dijera “vamos a ofrecerles algo” en vez de “vamos a prohibirles algo” y les facilitasen créditos blandos, o exención impositiva, o apoyo para la producción, o capacitación técnica, o facilidades para ubicar la verdura en el mercado, todo sería mejor. Pero esperamos oír esa frase, pero no la escuchamos. Solo escuchamos que es difícil implementar la franja de no fumigación.
Si los funcionarios de Producción vienen formateados con el concepto de que el agrotóxico no hace nada a la salud y que hay que promover la producción por encima de la salud... estamos e problemas.
