Editorial del Programa ECOS del día 7 de Septiembre de 2010
Médicos que gritan en el desierto verde: que dejen de fumigar
Se fueron aquietando los ecos del encuentro de médicos de pueblos fumigados que terminó la semana pasada en Córdoba.
Tuvo una efímera aparición en la prensa y luego volvimos al silencio al que nos tienen acostumbrado los medios masivos.
En aquella ocasión, médicos de diez provincias, investigadores y científicos de universidades nacionales pidieron a la presidenta Cristina Fernández y a los dirigentes agrarios de la Mesa de Enlace que se prohíba la fumigación aérea con agroquímicos en todo el país, y además, que se restrinja la fumigación terrestre en las zonas aledañas a los centros urbanos.
Los profesionales aseguraron en una carta pública a la Presidenta que "la agresión a la salud humana en las poblaciones de las localidades sometidas a fumigaciones" en el país "se agrava día a día" y afecta por lo menos 12 millones de habitantes. Resaltaron que como consecuencia de las fumigaciones se detectan en los consultorios y hospitales, con "mayor frecuencia", enfermedades como "canceres, abortos espontáneos, trastornos de la fertilidad y nacimiento de hijos con malformaciones congénitas", además de afecciones respiratorias, endocrinas, neurológicas y psíquicas.
"Esta situación se comenzó a observar con la instrumentación de la práctica agro-productiva que incluye la utilización masiva de plaguicidas químicos", agregaron los médicos, quienes destacaron que el consumo de agrotóxicos "creció en 14 años casi 1.000 por ciento".
El documento expresó que los habitantes de los pueblos fumigados reciben "en forma directa las aspersiones" porque se realizan sobre sus viviendas tanto desde el aire o en forma terrestre "hasta el limite mismo de sus casas y localidades".
Los médicos aseguraron que "la revisión sistemática de los estudios clínicos y epidemiológicos" sobre los efectos de los agroquímicos genera una evidencia "suficientemente fuerte y consistente" para reconocer que "la exposición a plaguicidas aumenta el riesgo de afectar la salud humana".
"Es urgente avanzar en las restricciones públicas al uso de los plaguicidas" porque en pocos meses, "en la presiembra de soja, se comenzara nuevamente a envenenar masivamente las poblaciones de los Pueblos Fumigados de la Argentina", afirmaron los médicos.
Los asistentes al encuentro en Córdoba también enviaron una carta pública a tres de los integrantes de la Mesa de Enlace agraria: Hugo Biolcatti, presidente de Sociedad Rural; Mario Llambias, titular de Confederaciones Rurales Argentinas; y Eduardo Buzzi, líder de la Federación Agraria. "Nos sentimos en la imperiosa necesidad de dirigirnos a ustedes, en forma directa y pública, para hacerles conocer que es muy grave la situación de la salud de las poblaciones de los pueblos fumigados en la Argentina y que esta se agrava día a día", expresaron en la misiva.
En tal sentido, dijeron que "en las 23 millones de hectáreas ocupadas por cultivos transgénicos viven, en o entre sus campos, 12 millones de compatriotas". "Ellos son nuestros pacientes y por lo tanto tenemos una enorme responsabilidad en el resguardo de su salud y en la defensa de sus derechos a la misma", consideraron.
Al primer Encuentro de Médicos asistieron 160 participantes de Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires, Neuquén, Santiago del Estero, Salta, Chaco, Entre Ríos, Misiones y Catamarca, además de académicos y científicos representantes de seis universidades nacionales.
Qué mas agregar?
Que aquí nos han mentido con la inaplicabilidad de la ordenanza que prohíbe la fumigación al lado de las casa?
Que aquí se sigue fumigando con franjas de separación inadmisibles?
Qué mas agregar?