Editorial del Programa ECOS del día 3 de Diciembre de 2016
El Papa le escribe al director de la FAO
Hoy quería abrir con el mensaje del Papa Francisco al Director General de la FAO José Graziano da Silva en el día Mundial de la Alimentación de este año, que complementa la encíclica Laudato Si.
Este mensaje dice en el punto 2:
“De la sabiduría de las comunidades rurales podemos aprender un estilo de vida que nos puede ayudar a defendernos de la lógica del consumo y de la producción a toda costa; lógica que, envuelta en buenas justificaciones, como el aumento de la población, en realidad sólo busca aumentar los beneficios. En el sector del que se ocupa la FAO está creciendo el número de los que piensan que son omnipotentes y pueden pasar por alto los ciclos de las estaciones o modificar indebidamente las diferentes especies de animales y plantas, provocando la pérdida de esa variedad que, si existe en la naturaleza, significa que tiene ?y ha de tener? una función. Obtener una calidad que da excelentes resultados en el laboratorio puede ser ventajoso para algunos, pero puede tener efectos desastrosos para otros. Y el principio de precaución no es suficiente, porque muy a menudo se limita a impedir que se haga algo, mientras que lo que se necesita es actuar con equilibrio y honestidad. Seleccionar genéticamente un tipo de planta puede dar resultados impresionantes desde un punto de vista cuantitativo, pero, ¿nos hemos preocupado de las tierras que perderán su capacidad de producir, de los ganaderos que no tendrán pastos para su ganado, y de los recursos hídricos que se volverán inutilizables? Y, sobre todo, ¿nos hemos preguntado si ?y en qué medida? contribuirán a cambiar el clima?
Por tanto, no precaución sino sabiduría. Esa que los campesinos, los pescadores, los ganaderos conservan en la memoria de las generaciones, y que ahora ven cómo está siendo ridiculizada y olvidada por un modelo de producción que sólo beneficia a pequeños grupos y a una pequeña porción de la población mundial. Recordemos que se trata de un modelo que, con toda su ciencia, consiente que cerca de ochocientos millones de personas todavía pasen hambre.”
Papa Francisco al Director General de la FAO