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Editorial del Programa ECOS del día 20 de Mayo de 2017

 

Bisfenol A sustituido por algo peor

 

 

Se acuerda del bisfenol A? ese químico que venía en los plásticos y que fue tanto el alerta sanitario que se armó, porque provocaba todo tipo de problemas de salud al ser un disruptor endocrino, esto es, que imita el funcionamiento de las hormonas en el cuerpo, que fue prohibido en las mamaderas, chupetes, y luego el alerta pasó a las botellas de agua (porque migra del plástico al agua) y finalmente la industria dijo: no os preocupéis, lo cambiaremos por un sustituto! Se llama Bisfenol S, BPS, y todo estará bien.
Pues en Orlando, hace un par de semanas, se realizó ENDO 2017 el congreso número 99 de la Sociedad Internacional de Endocrinología, y hubo algunas sorpresas.
Presentaron un nuevo estudio que revela que el bisfenol S, el presuntamente inocuo sustituto del bisfenol A aumenta la agresividad del cáncer de mama a través de su comportamiento como un químico perturbador hormonal.
Este BPS se encuentra en plásticos duros de policarbonato, billetes y recibos de papel térmico, así como muchos productos que se promocionan libres de BPA. El famoso Guatemala a guatepeor.
"A pesar de las esperanzas de una alternativa más segura a la BPA, los estudios han demostrado BPS para exhibir similar estrógenos imitación de comportamiento a BPA", dijo el investigador principal del estudio, Dr. Sumi Dinda, de Oakland University School of Health Sciences, Rochester, EEUU.
Su estudio confirmó que BPS actúa como el estrógeno en las células de cáncer de mama, un potente disruptor endocrino.
Los endocrinólogos están en el centro de la solución de los problemas de salud más urgentes de nuestro tiempo, desde la diabetes y la obesidad hasta la infertilidad, la salud ósea y los cánceres relacionados con las hormonas. La Sociedad Endocrina es la organización más antigua y más grande del mundo de científicos dedicados a la investigación hormonal y los médicos que cuidan a las personas con condiciones relacionadas con las hormonas.
La Sociedad cuenta con más de 18.000 miembros, incluidos científicos, médicos, educadores, enfermeras y estudiantes de 122 países. www.endocrine.org.
Estos hallazgos nos ponen nuevamente de cara a lo que venimos diciendo en el mundo de la química: cuando vienen vendiendo una sustancia que es malísima para la salud y ya no pueden ocultar sus efectos, se hacen los que “yo no sabía, disculpen ustedes… acá tienen un sustituto más seguro” y zás, ahí empiezan a vender profusamente su plan B para no perder el negocio.
Lo hacen a diario con los pesticidas y los herbicidas.
Y nosotros, y todos los que tratamos de promover una química que simplemente no nos mate ni nos enferme, corriendo como locos atrás de chequear y ver si son o no son la manzana de Blancanieves. Vamos perdiendo por goleada, se darán cuenta. Pero al menos en algunas cosas lo fuimos logrando. La docena sucia es un ejemplo, en el acuerdo de Estocolmo. Pero la lista es descomunalmente larga…