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Editorial del Programa ECOS del día 5 de Diciembre de 2020

 

Represas en Santa Cruz, ocultas tras la pandemia

 

 

Este tema omnipresente de la pandemia ha hecho que no se hable más en los medios sobre otra pila de cosas, atentos a que es una emergencia, y una tragedia para miles de personas. Sin embargo, otras cosas fueron sucediendo, y entre ellas, siguen allí las proyectadas dos mega represas del río Santa Cruz.
La Corte Suprema de Justicia le ha pedido al Estado Nacional que le informe sobre los avances (si los hubo) de su construcción, y le ha pedido a tres organismos que expliquen un poco más acerca del posible impacto negativo que tendrán en el ambiente.
Le pidió a la Administración de Parques Nacionales que se expida a partir del examen del Estudio de Impacto Ambiental, acerca de los posibles daños a la biodiversidad, y especificó que quería más datos sobre la subsistencia y conservación del ave autóctona macá tobiano. Con esas observaciones, Parques debe emitir una opinión fundada sobre si las medidas que presenta el plan de gestión ambiental van a servir o no van a servir para proteger la especie.
A todo esto, y bastante contradictorio por cierto, el Gobierno de Santa Cruz declaró Monumento Natural al macá tobiano, la especie de ave que vive exclusivamente en un sector de la provincia y en ninguna otra parte del mundo, y que está dentro del programa nacional Extinción Cero, cuando al mismo tiempo, en 2017 el mismo gobierno dio luz verde a una mega obra que viene a acabar con esa especie!
Recordemos que la ONG Banco De Bosques (a quienes entrevisté en este programa sobre este tema) encabeza una causa judicial que busca proteger a la comunidad y al medio ambiente de los enormes efectos que tendrán las megarepresas. En ella ha presentado pericias biológicas e informes científicos que advierten sobre estos peligros, ofreciendo muchos y firmes argumentos legales y advertencias científicas. Se asegura que el macá tobiano SI puede extinguirse con el avance de las mega represas, ya que Santa Cruz alberga casi la totalidad de la población del macá tobiano, alrededor del 98%.
También me enteré que las organizaciones que buscan proteger las zonas de alimentación del macá tobiano se toparon con la Ley Provincial 3.692, que prohíbe crear áreas protegidas en Santa Cruz hasta tanto no se realice un inventario de estancias ganaderas productivas, algo que no sucede desde hace más de 70 años. Le han pedido al Gobierno de Santa Cruz que se derogue la “Ley de Emergencia Rural”, argumentando que “es ridículo hacerle pagar a la naturaleza santacruceña la debacle productiva que sufre el sector ganadero en la región desde hace 30 años”, y que diversos organismos, incluyendo el INTA, atribuyen a la desertificación, a falta de competitividad y la migración de la fuerza productiva hacia las ciudades, dicen.
Sofia Nemenmann es co-fundadora del proyecto Río Santa Cruz Sin Represas y ella habla siempre de la dimensión de la obra. El río Santa Cruz es el último río glaciario libre de Patagonia, que nace en los Campos de Hielo Patagónicos, la segunda reserva hídrica más grande del mundo.
En contexto de crisis hídrica presente y la que se viene con el cambio climático, es una locura hacer esta megaobra, que impactará en toda la biodiversidad alimentada por este río, y, no menor, y controversial, el potencial impacto en el emblemático glaciar Perito Moreno.
Hasta ahora, silencio de parte del gobierno tanto Nacional como Provincial. ¿La pandemia se usará de pantalla para avanzar en este tipo de megaobras y ocultar las inocultables y enormes externalidades negativas? Eso es muy vil.